Cuando pensamos en apagar el router por la noche, es importante considerar tanto los beneficios como los inconvenientes de esta acción.
En la actualidad, cada vez más dispositivos en nuestros hogares están conectados a Internet, desde teléfonos y televisores hasta aspiradoras y bombillas. Por lo tanto, es crucial comprender las implicaciones de dejar nuestra casa sin conexión durante varias horas al día.
¿Cuándo apagar el router?
Antes de decidir cuándo apagar el router, es importante tener en cuenta algunas situaciones. Por ejemplo, si enfrentamos problemas de conexión, apagar y reiniciar el router puede ser una solución básica.
Además, si planeamos estar fuera de casa por semanas o meses, podemos considerar apagar el router. Sin embargo, esto depende del tipo de dispositivos conectados que tengamos, como sistemas de videovigilancia o alarmas de seguridad que necesiten acceso a través de Internet.
¿Y si quiero ahorrar?
Si el objetivo es ahorrar energía y reducir el consumo fantasma, apagar el router por la noche puede parecer una opción tentadora. Sin embargo, es importante destacar que el consumo del router es mínimo en comparación con otros electrodomésticos.
Según estimaciones, un router consume entre 5 y 10 W al día, lo que se traduce en un ahorro de aproximadamente 2,4 kW al mes si se apaga durante la noche. Aunque puede parecer un ahorro pequeño, esto dependerá del precio de la electricidad en tu área.
Problemas de apagarlo
No obstante, debemos tener en cuenta los problemas que pueden surgir al apagar el router. En primer lugar, muchos dispositivos inteligentes en nuestros hogares requieren una conexión constante a Internet para funcionar correctamente.
Si tenemos cámaras de seguridad, sistemas de domótica o dispositivos controlados a través del teléfono móvil, apagar el router interrumpirá su funcionamiento. Además, las actualizaciones y revisiones de estos dispositivos suelen realizarse durante la noche, lo que podría verse afectado si apagamos el router.
Sí deberías reiniciarlo
Es importante señalar que apagar y encender el router constantemente puede acortar su vida útil y afectar su rendimiento. Estos dispositivos están diseñados para funcionar durante períodos prolongados sin desconexiones frecuentes.
En conclusión, apagar el router por la noche puede tener más inconvenientes que beneficios. A menos que enfrentemos problemas de conexión específicos o necesitemos apagarlo por períodos prolongados, es recomendable mantenerlo encendido. En su lugar, es útil reiniciar el router regularmente, aproximadamente una vez a la semana, para optimizar su funcionamiento.